martes, julio 04, 2006

LUZ DE VELA


Esta noche me hiciste falta. En mi cama mis manos te buscan y solo encuentran el vacío que nada ni nadie ha podido llenar. La habitación, iluminada únicamente por un par de velas, se recubre de tu recuerdo. Y afuera de ella el cielo llora… por que no te tengo aquí.

Me gusta escuchar a la lluvia. Me dice secretos y me ayuda a pensar… en ti.

El agua de lluvia llega a la tierra para limpiarla de sus penas y sus culpas, como el llanto purifica al alma.

Y así, mientras afuera la tierra se revuelve y se renueva… en mi cama mi ilusión te trae hasta mi… y en mi mente te tomo en mis brazos, como aquella vez cuando antes de cruzar la puerta de tu casa un abrazo dijo todo, sin que dijéramos nada.

Mis ojos comienzan a cerrarse. Pareciera como si mi cuerpo se empeñara en dormir. Y aunque yo intento mantenerme despierto, la Luna me dice “No seas tonto… duerme… y ella llegará a tus sueños”.

Quizá tú ya estés dormida… pero esta noche la Luna, la lluvia y yo hemos hecho un trato. La lluvia creará una cascada que arrulle tu sueño… yo te miraré con los ojos cerrados desde mi cama… y esta noche la Luna transformará el color de sus rayos… para convertirlos en luz de vela.